Para mí la mujer más importante de mi vida siempre será mi abuela Nina, a pesar de que falleció cuando yo solo era una adolescente, pero esos años de vida los recuerdo con muchísimo cariño y amor, al igual que fuerza y coraje. Mi abuela se quedó viuda con 4 hijas y 6 hijos, teniendo 9 años la más pequeña, y, sin haber trabajado fuera de casa nunca, no le quedó más remedio que sacar a su familia adelante. Los educó como personas fuertes e independientes en un mundo donde todo el mundo podía aportar algo bueno, por poca cosa que pareciese. Le encantaba coser, hacía todo tipo de prendas, de hecho, le hizo el vestido de su boda a una de mis tías. También le encantaba salir a pasear con sus nietos y nietas, todas las tardes nos pedía que la llevásemos a un su parque favorito y disfrutaba contándonos historias y escuchando las nuestras entre aquellos árboles grandes.